Una fotocélula o célula fotoeléctrica es un dispositivo electrónico que responde al cambio en la intensidad de la luz. Las fotocélulas están compuestas de un elemento emisor que genera la luz, y un elemento receptor que percibe la luz generada por el emisor.
Están diseñados especialmente para la detección, clasificación y posicionado de objetos; la detección de formas, colores y diferencias de superficie, incluso bajo condiciones ambientales extremas.
Los sensores de luz se utilizan en mecanismos de movimiento principalmente para detener dicho movimiento aunque en algunas ocasiones también se emplean para la apertura de puertas sin contacto.
Existen tres tipos de sensores fotoeléctricos, los sensores por barrera de luz, reflexión sobre espejo o reflexión sobre objetos.
Empleo de fotocélulas como dispositivo de seguridad:
Al interrumpir el haz de luz que conecta el elemento emisor con el receptor, este último manda una señal a la placa electrónica que hará que la puerta o mecanismo en movimiento se detenga; evitando de esta manera cualquier posible accidente.